Protección de Derechos Forestales Generaría Beneficios en América Latina.
Emisión de CO2 podría disminuir notablemente al proteger derechos forestales indígenas en América Latina.
Proteger los derechos forestales de las comunidades indígenas en países como Brasil y Guatemala generaría "sustanciales beneficios económicos", según un estudio publicado hoy por el ‘World Resources Institute’, con sede en Washington.
De acuerdo con "Costes y beneficios económicos de proteger los derechos forestales comunitarios: casos de Brasil y Guatemala", una inversión "relativamente modesta" para garantizar que se protejan los derechos sobre estos bosques, generaría "importantes retornos" económicos, sociales y medioambientales.
El principal de estos beneficios se daría al disminuir la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera, ya que se evitaría la emisión de más de 5.400 millones de CO2 en los próximos veinte años. Esta cifra es el equivalente a lo que emiten más de 1.000 millones de coches en un año.
"Proteger los derechos de los bosques de las comunidades en Brasil y Guatemala es una inversión positiva para ambos países, que conlleva importantes implicaciones para muchas otras naciones", indicó la economista y coautora del informe, Erin Gray.
En el caso de Brasil, donde los territorios indígenas en la Amazonía ocupan el 13 por ciento de la superficie del país, el ‘World Resources Institute’ calcula que se podrían evitar emisiones de forma que el Estado obtuviese un "beneficio" de hasta 161.700 millones de dólares en dos décadas.
En Guatemala, la protección de la reserva maya de la biosfera podría generar al país centroamericano beneficios por valor de 605 millones de dólares durante el mismo período. "Las implicaciones globales son muy grandes. Los pueblos indígenas y las comunidades tienen derechos legales sobre alrededor de una octava parte de los bosques del mundo. Cuando invertimos en reforzar sus derechos, estamos invirtiendo en un mundo con un clima más estable", indicó el economista y coautor del informe, Juan Carlos Altamirano.